Jesús Nuestra Oportunidad

No podemos decir que conocemos a Dios si no vivimos en obediencia a sus mandamientos. La obediencia es una de las principales evidencias de una fe genuina en Cristo, y este sermón busca profundizar en esa verdad esencial. Aunque muchos afirman creer en Dios, sus vidas a menudo contradicen esa confesión. La Escritura es clara: una fe sin obediencia no sólo es defectuosa, sino que puede llegar a ser una mentira peligrosa.

El apóstol Juan, en su primera epístola, subraya que la verdadera conversión implica aceptar el señorío de Cristo y someterse a su voluntad. Esto no es un acto puntual, sino un proceso continuo en el que renunciamos a nuestros propios deseos y nos alineamos con los propósitos de Dios. Este camino puede ser desafiante, pero es en la obediencia constante donde encontramos el verdadero crecimiento espiritual y una mayor intimidad con nuestro Señor.